Los maestros en nuestras vidas

Los maestros en nuestras vidas

¿Cómo definimos la palabra maestro? Aquel que enseña, aquel que corrige, aquel que orienta… seguramente tenemos infinidad de imágenes, conceptos que nos hablan de un maestro. Y a todo esto quiénes verdaderamente han sido nuestros maestros en la vida.

Por. Redacción

William de Colombia nos comenta: varios han sido mis maestros, mi madre es un modelo de vida le tocaba duro debido a que crecí sin papá, nunca se quejó, de ella aprendí los valores, las tablas de multiplicar ella es mi primera gran maestra. Mis profesores del conservatorio eran muy buenos de ellos aprendí de todo un poco; pero quien despertó en mí varias inquietudes, como el tener hambre del conocimiento fue un periodista de Antioquía Néstor Armando Alzate tenía un programa de radio y él siempre narraba historias y enigmas del mundo, el modo en que las desenvolvía me cautivó, eso me llevó a preguntarme ¿qué existe más allá de las fronteras?, así fue como conociendo culturas he aprendido diferentes idiomas, hasta el momento el sigue siendo mi maestro, por su calidez de persona. Lo que sí es verdad es que cada una de las personas con quienes me he encontrado me han enseñado algo o bien he podido enseñarles algo sin intención.

 Baneetza de Venezuela nos dice: terrenalmente me vienen a la mente muchas personas que me han acompañado humana y espiritualmente, pero el común denominador de ellas ha sido el amor, el servicio, la entrega, la generosidad y la gratuidad de cada uno de ellos, ya que su recompensa es eterna, y con gran certeza puedo decir que mi maestro es Jesús. Pero dentro de nosotros hay una voz, que para mí es una guía que me sugiere, es importante hacer ese espacio para escuchar. Jimy de Guatemala expresa: un maestro en mi vida ha sido sin duda, mi padre, que, en medio de muchas limitaciones, pudo sacarnos adelante a sus cuatro hijos. Siempre nos enseñó el valor del trabajo, la honradez y lo más importante la unidad familiar. Sin comodidades mi papá nos inyectaba continuamente el deseo de superación y alegría en las adversidades. 

Segysel de Cuba manifiesta: mi papá para mí continúa siendo un ejemplo de humildad, perseverancia y generosidad, me ha enseñado a valorar cada día con sus zozobras y alegrías me ha inculcado según sus experiencias y a través de no tener ninguna creencia religiosa, la vocación al servicio, a dedicar mi vida por el bien de los demás y por obras que trasciendan. Noel de Venezuela formula: en realidad yo trato de ver a Jesús y no una persona en particular, porque tener un maestro en la vida significa querer ser como él, pero las personas siempre fallamos, yo veo las cosas positivas en las personas, sin idealizar. 

Rebeca de México sintetiza: De mi padre he aprendido la justicia. También de mis amigos laicos consagrados, a dar espacio, a relacionarme con Dios, la autenticidad, la transparencia, inclusive la importancia de equivocarse. Desde nuestras experiencias el maestro siempre ha sido aquel que nos ha impulsado a ubicarnos o bien salir de donde estamos para descubrir nuevos horizontes. Los maestros atraen con sus perspectivas, nos contagian de sus ideales y nociones, pero en realidad el maestro nos ayuda a enriquecer lo que verdaderamente somos. Y ¿quién es tu maestro?

Leave a Reply

Your email address will not be published.