¿Un signo de los tiempos en la Amazonía?

¿Un signo de los tiempos en la Amazonía?

Reseña por redacción

Cuando gobiernos e iglesia piensan en la Amazonía simultáneamente.

“Este encuentro es lo más fuerte que se ha hecho en defensa de la cuestión del clima”, dijo el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, al inaugurar la Cumbre de la Amazonia, este martes, en la ciudad de Belém, capital del estado brasileño de Pará. Agregó que “la historia de defensa de la Amazonia y la selva será resumida en dos momentos: antes y después de la cumbre”. 

En ese encuentro los gobiernos de los ocho países que comparten la selva amazónica buscan unificar posiciones para llevar a la próxima Cumbre del Clima y para implementar políticas de protección de esa re- “La protección ambiental debe ser acompañada por la creación de trabajo digno para los habitantes de la región, por la valorización de los pueblos indígenas y las comunidades locales, y por el combate del tráfico internacional”. “La Amazonia, no es un tesoro para ser saqueado” Lula Propuso: “la creación de un centro común de investigación científica” enfocado en la selva tropical, y argumentó contra el uso de energía fósiles como: carbón, petróleo y gas. Petro “La democracia, para que sea efectiva, tiene que incluir a los más vulnerables”, “la prioridad tiene que responder a las necesidades de bienestar de nuestras comunidades que habitan en esta región”, porque “la pobreza y la desigualdad son más críticas” en la Amazonia. Boluarte “Es estrategia para Estados Unidos la instalación de bases militares en la región. Nos debe llamar la atención esa misión. También es preocupante que Europa esté en la misma posición”. Al mismo tiempo abogó por trabajar de manera coordinada para frenar la deforestación, que se encuentra en “niveles alarmantes”. Arce gión y del bioma. Al respecto, Lula dijo que hasta ahora era el mundo el que daba su opinión sobre la Amazonia, y que, a partir de ahora, “es la Amazonia la que levanta su voz para hablar con el mundo”.

Estas son algunas de las intervenciones de los mandatarios:

Estos son los cinco puntos claves de lo pactado en Belém do Pará:

Canje de deuda: en el eje de cambio climático, el documento propone que los países busquen “mecanismos innovadores de financiamiento”, como el canje de deuda externa de los países amazónicos para conservar la selva. La Alianza Amazónica de Combate a la Deforestación: la Declaración propone crear esta Alianza, de modo que los países puedan cumplir sus metas en deforestación, aunque, el documento no menciona una meta común. En el caso de Colombia, el plan es llegar a deforestación cero para 2030. 

Bioeconomías y una Mesa Técnico Científico Intergubernamental de la Amazonia: La Declaración busca lograr que las bioeconomías aporten a la sostenibilidad de los pueblos indígenas y comunidades campesinas, y que vayan de la mano con investigación. 

Centro de Cooperación Policial Internacional de la Amazonia y un Sistema de Control de Tránsito Aéreo: la Declaración propone que este Centro tenga sede en Manaos (Brasil) para intercambiar información y desarrollar investigaciones y alertas entre los ocho países, con el fin de combatir delitos transfronterizos, como la minería en los ríos amazónicos. 

Red de Autoridades del Agua: el pacto de los países amazónicos incluye varios puntos en torno al agua. Uno es crear esta Red para establecer protocolos de monitoreo para proteger las fuentes y para generar alertas de riesgos ambientales, como desastres ambientales. 

Una nueva etapa para la iglesia de la Amazonía 

Como una Iglesia en salida y comprometida con la defensa de la casa común y de los pobres, con rostro amazónico y sinodal. Así se ve la CEAMA, como recoge el Comunicado Final de su Asamblea Ordinaria realizada en Manaos del 8 al 11 de agosto de 2023. Una asamblea que definen como “el primer momento constitutivo y organizativo oficial, tras la aprobación de los estatutos de la Conferencia por el Papa Francisco”. 

Un comunicado que habla de gratitud a quienes han deseado “ser expresión de una Iglesia que camina sinodalmente, consciente de que somos continuadores de una historia que no comenzó ahora y que se inspira en las proféticas palabras del Papa San Pablo VI: ‘Cristo apunta a la Amazonia’». Una asamblea que ha dado valor a las sabidurías y espiritualidades ancestrales de los pueblos indígenas, “con las que queremos seguir escribiendo nuestra historia y favoreciendo el surgimiento de una nueva etapa para la Iglesia de la Amazonía, asumiendo cada vez más las conclusiones y propuestas del Sínodo Especial sobre la Amazonía”, y de los pasos dados desde 1972 en Santarém. 

Los participantes de la Asamblea hablan de desafíos y preocupaciones, que ayuden a encarnar el Sínodo para la Amazonía, siendo conscientes de “la necesidad de ser capaces de aprender, desaprender y reaprender con los pueblos de la Amazonía, para enfrentar con ellos los desafíos y ser como un ‘perfume nuevo’ en y para la Iglesia universal”. Entre los desafíos relatan el rechazo al magisterio del Papa Francisco en algunos espacios y grupos, el clericalismo y los crímenes cometidos contra la vida y el bioma amazónico y los territorios de los pueblos indígenas. 

El escrito denuncia la poca preocupación de los políticos con la gravedad de la crisis socio-ambiental, mostrando solidaridad con el pueblo ecuatoriano por el clima de violencia y destacando la importancia de la realización de la Cumbre de la Amazonía, a pesar de “la tímida y vaga respuesta de los presidentes de los países amazónicos, reunidos en Belém, frente al desafío del cambio climático y las amenazas al bioma amazónico, ignorando además las voces de los pueblos originarios y de la sociedad civil”, así como la protección del Parque Nacional Yasuní en Ecuador de la explotación petrolera, y otras situaciones presente en la Amazonía. 

Caminar en armonía y sinergia 

Se reconocen algunos signos de esperanza, viendo como un desafío una mayor comunicación y claridad con relación a los papeles y a la articulación entre la CEAMA y la REPAM, y la relación con las diferentes Conferencias Episcopales y con la vida consagrada y su presencia efectiva en los territorios amazónicos, con la consecuente resonancia e incidencia en las bases. Se quiere “caminar en armonía y sinergia”, y se insiste en escuchar, dialogar y actuar. 

Se destaca una vez más la “conciencia de la importancia de la región no sólo para los amazónicos, sino para toda la humanidad, ampliando nuestro horizonte a toda la Iglesia universal y a nuestra casa común”. En esa perspectiva se sienten “confirmados y llamados como CEAMA a continuar el movimiento itinerante del Espíritu”, destacando la importancia de la nueva composición de la presidencia, “totalmente coherente en su representatividad con la sinodalidad hacia la que queremos caminar”. 

Finalmente se destaca que “la importancia y el protagonismo de las mujeres se hace cada vez más presente”, y dicen volver para las iglesias particulares, “con el deseo de hacer realidad el rostro amazónico y sinodal de la Iglesia, siempre en salida y en movimiento, animada y fortalecida por una pastoral de conjunto que sepa acoger y valorar a todos, en la riqueza de la unidad en la diversidad y en el cuidado de toda la belleza de la creación y de todas las criaturas y pueblos de la Amazonía”. Reseña por redacción. 

Fuentes: ADN Celam, El Espectador.

Leave a Reply

Your email address will not be published.