La Diócesis de Santa Rosa de Osos, a través de un comunicado de prensa lamentó y expresó su preocupación por la crisis humanitaria que padecen las comunidades del nordeste de Antioquia y sur de Bolívar.
Las confrontaciones de las bandas criminales, deja hoy en estos municipios un número considerable de asesinatos, amenazas, instrumentalización, desplazamientos, confinamientos, restricciones a la movilidad y desabastecimiento de alimentos en la población.
Garantizar la dignidad de cada persona
Frente a esta situación hicieron un llamado a vencer la indiferencia y a trabajar decididamente por el bien común de las comunidades, que son las más vulnerables en este conflicto armado que se libra.
Observaron también que «la defensa y respeto por la vida humana es superior a cualquier deseo de orden material», esto, al referirse a uno de los flagelos que altera la tranquilidad de la población por cuenta de la extracción ilegal de metal por parte de grupos armados.
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Un llamado a la concertación
En su mensaje, pidieron a las autoridades departamentales, nacionales y locales para que de acuerdo al mandato que tienen, asuman el control y den salida a la crisis humanitaria y pongan fin a las amenazas que se generan contra la población.
De otro lado, exhortaron a los actores que alteran el orden y la estabilidad de la población para que tengan gestos de conversión y salgan de la ilegalidad buscando mejores condiciones de vida para ellos y ayuden en la transformación de calidad de vida de las personas que sufren el flagelo de la violencia.
Finalmente, reafirmaron el compromiso de la Iglesia en el empeño de acompañar a las comunidades en «la salvaguarda de su dignidad desde los valores del Evangelio, así como y continuar en la disposición de ser instrumentos de diálogo, perdón y reconciliación que nos permitan vivir como hermanos, hijos de Dios».
Contexto
Los fuertes enfrentamientos que se registraron en los últimos días entre la subestructura Uldar Cardona del «Clan del Golfo», el frente guerra Darío Ramírez del Eln y el frente cuatro del Estado Mayor Central, en límites entre el sur de Bolívar y Nordeste Antioqueño, dejan ya más de 260 personas desplazadas. Además, en los últimos días hubo fuertes enfrentamientos entre uniformados del Ejército Nacional y el Clan del Golfo que dejaron cuatro soldados muertos y otros ocho heridos.