Fuente. https://www.elmundo.es/
Cierra su visita a Marsella con una misa en la que vuelve a defender la acogida de ‘sin papeles’
El Papa Francisco se reunió en Marsella con un grupo de miembros de SOS Mediterranée, una ONG que se encarga de ayudar a los inmigrantes que naufragan al tratar de cruzar el Mediterráneo. Uno de ellos le entregó un chaleco salvavidas de niño: “Lo que queríamos era invitarle a nuestro barco (de rescate), pero como no puede venir, le hemos traído el barco a través de este objeto simbólico: un chaleco que ha salvado la vida de muchos bebés. Se ha usado la última vez hace tan solo unas semanas”.
El encuentro, que tuvo lugar por la mañana, ilustra bien la visita de dos días del Papa a Marsella y el fondo de su mensaje: a favor de la inmigración y muy crítico con Europa, que debate ahora qué hacer con las decenas de miles de sin papeles que han llegado en apenas unos días a la isla italiana de Lampedusa.
Francisco ya lo dijo el viernes, recién aterrizado, y este sábado lo reiteró: Las personas que “se juegan la vida en el mar no invaden, buscan acogida, buscan vida”, dijo en un discurso en el Palacio del Faro con el que clausuró los encuentros Mediterráneos, que han reunido estos días a obispos y fieles. “Hay un grito que resuena y convierte el Mare Nostrum en Mare Mortum”, dijo en presencia del presidente francés, Emmanuel Macron. (…)
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