Mafalda llegó a sus 60 años y los celebra con una exhibición itinerante por Colombia

El 29 de septiembre de 1964, en las páginas de la revista Primera Plana en Argentina, fue la primera aparición de Mafalda. Casi de inmediato, su creador Quino confesó que ella había cobrado vida propia, a tal punto que él dejó de controlarla. 

Fueron menos de nueve años en los que Joaquín Salvador Lavado Tejón, Quino, llevó las historias de Mafalda a las páginas de distintos medios argentinos, tiempo suficiente para hacer historia con esta niña tan particular, una pequeña que desde siempre, gracias a esa sensibilidad social otorgada por su creador, se cuestionaba todo sobre un mundo cada vez más complejo. 

Pero Mafalda no solo se hizo famosa por su pensa miento crítico, sino también por su particular forma de ser: una niña argentina de seis años, amante de Los Beatles, residente del barrio San Telmo en Buenos Aires, interesada en la paz, los derechos humanos y la democracia, a la que le gusta leer, escuchar las noticias, mirar la TV, jugar al ajedrez, al bowling y a las hamacas, y por supuesto, una enemiga acérrima de la sopa.

Sin duda, todo un ícono cultural, reconocido y apreciado en el mundo por su humor incisivo y su tajante crítica social.

No en vano, en todos estos años, Mafalda ha influenciado a varias generaciones y sigue siendo relevante en la cultura popular, aun cuando su creador ya no está.

Sus libros, una compilación de historietas, que tan solo en los primeros años ya habían vendido en su país más de 20 millones de ejemplares, hoy se han traducido a más de 30 idiomas, y sus historias siguen siendo estudiadas y apreciadas por los ‘Mafaldomaníacos’. 

De hecho, críticos de los medios de comunicación, como el ya fallecido semiólogo, filósofo y escritor italiano, Umberto Eco, se rindieron un día ante la agudeza de Mafalda y la calificaron con elogios como: “Una heroína iracunda que rechaza al mundo tal cual es, reivindicando su derecho a seguir siendo una niña que no quiere hacerse cargo del universo adulterado por los padres”.

Y es que esta niña irreverente y contestataria, que nació en un contexto histórico y cultural bastante tumultuoso, hoy sigue respondiendo a los cambios del mundo, aunque hayan pasado 60 años.

Y lo hace porque, por desgracia, no han cambiado demasiado las cosas en el mundo, pues sus conflictos políticos y sociales siguen siendo casi que los mismos. Algo por lo que Mafalda parece siempre tener el hilo en cada tema: feminismo, igualdad, corrupción de  clases políticas o ecología, son algunas de las muchas preocupaciones que la hacen tan actual.

 Ahora bien, para los que apenas aterrizan en la historia de Mafalda, aun habiéndola conocido hace 60 años, hay que decir que esta niña inmortal, originalmente fue concebida por Quino como parte de una campaña publicitaria, específicamente para una línea de electrodomésticos que nunca se concretó. Sin embargo, su potencial era evidente, y pronto encontró su lugar en el mundo.

La niña que no tomaba sopa fue más “una metáfora sobre el militarismo y la imposición política”, dada por Quino, quien se inspiró para bautizarla ‘Mafalda’ gracias a una novela de David Viñas llamada ‘Dar la cara’, en la cual aparecía una niña llamada del mismo modo.

Tal fama le valió a esta pequeña conseguir hacerse de una variada lista de admiradores ilustres, incluyendo el escritor Gabriel García Márquez y al cantante Joan Manuel Serrat.

 Con esa lógica infantil con la que expuso las incoherencias y contradicciones del mundo adulto, hoy sigue cuestionándolo todo con implacable ingenuidad, mientras su imagen, tierna y global, se recrea en afiches, camisetas, bolsos, tarjetas, útiles escolares y todo tipo de productos. 

Y, como bien dice ella: ¿Qué importan los años? Lo que realmente importa es comprobar que, al fin de cuentas, la mejor edad de la vida es estar vivo”.

Mafalda Itinerante

 Con su carácter inquisitivo y su preocupación por la paz y la justicia social, esta pequeña niña se ha convertido en la voz de la conciencia de muchos de sus seguidores, y por eso, para celebrar su aniversario, el famoso personaje de Quino aterrizó en Colombia para pasar una buena temporada en el país, de la mano de varios artistas contemporáneos. 

Y lo ha hecho, gracias al proyecto desarrollado por la Fundación Corazón Verde, desde su plataforma artística El Coso y en alianza con los sucesores y titulares de los ‘derechos de autor’ de Quino, quienes han permitido que la pequeña Mafalda comenzará una gira itinerante que arrancó por las instalaciones del Aeropuerto El Dorado de Bogotá, en mayo, para acercar más a los viajeros y personas en general, a este importante personaje contestatario y exponente fiel de la rebeldía juvenil de los años sesenta. 

Fuente https://www.elpais.com.co/entretenimiento/ 

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