El Colegio Víctor Raúl Haya de la Torre, del departamento de Huánuco, en la zona centro del Perú, nos abrió las puertas para participar en la jornada escolar, distrital y parroquial de San Rafael.A la misma asistieron más de 100 alumnos de primer y segundo año de secundaria, además de varios alumnos de algunos pueblos del distrito de San Rafael.
En esta actividad contamos con la presencia de la coordinadora de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL), el coordinador académico de Ambo, provincia de Huánuco y la coordinadora de la Oficina Nacional de Educación Católica de Ambo; así como todos los profesores de religión del distrito de San Rafael y sus pueblos.

Estuvo también el Padre Ricardo- responsable del distrito de San Rafael- acompañado de un sacerdote Franciscano Capuchino y dos jóvenes carismáticos que amenizaron con canciones y juegos.
El Sacerdote Capuchino habló sobre la Vida de Fray Alfonso Sardinas, segundo obispo de Huánuco, ejemplo de vida para los jóvenes.

El arte de Amar fue el tema central de la jornada, introducido y desarrollado a través de talleres que permitió a los participantes una profundización vivencial de cada punto. Desplegado, después, mediante la creatividad de cada grupo en: pintura, teatro, oraciones.
Uno de los profesores decía que se iba contento porque había profundizado el amor de Dios vivencialmente.

“Para mí, personalmente, fue una experiencia bella encontrarme con la pureza de un pueblo, de los chicos. Cuando preparaba el taller, pensaba hacerlo utilizando herramientas, que me parecían más didácticas, como audiovisuales, por ejemplo, pero no fue posible y, sin embargo, frente a los chicos nada de estas herramientas fueron necesarias, encontré una capacidad de escucha que me impresionaron. La participación de ellos en los talleres, me conmovió. Constato que más que darles algo he recibido mucho más de los chicos”. ( Edith, focolarina)
“Esta experiencia marca en mi vida un antes y ahora un después. Soy una voluntaria de Dios, oriunda de estas tierras. Cuando llegó el Movimiento a Perú, por muchos años contribuí concretamente a llevar el Carisma de la Unidad en Lima y ahora siento mucha alegría de poder compartir este tesoro también aquí, en tierras Huanuqueñas, como una manera de dar esta vida de Dios a mi propia gente”. (Yesica, voluntaria). Sentimos que esta experiencia es solo un inicio.
Por Edith Chávez y Yesica Blácido Trujillo – Perú
